Aloe de vera para piel quemada por el sol
El aloe vera es un podero ingrediente para muchas afecciones. Las plantas en general tienen poderes curativos innegables, pero ésta en especial es maravillosa para muchas afecciones en la piel, la salud y la belleza. En esta oportunidad vamos a comentarte cómo calmar las quemaduras de sol con aloe vera, esta sorprendente planta cargada de propiedades.

El poder curativo de las plantas no se puede negar, especialmente cuando algo tan simple puede proporcionar un gran alivio para los dolores o quemaduras de sol. El aloe de vera es un potente antiinflamatorio y más aún cuando se aplica directamente desde la planta.
Usar gel de aloe de vera en una quemadura de sol es simple. Para ello, corte un trozo de la planta con un cuchillo afilado. Se recomienda cortar en ángulo y no al final de la hoja pues no se sellará y estará disponible para cortar otra vez. A continuación, con un cuchillo afilado dividir la hoja por la mitad para que el interior del gel pueda utilizarse. Tomar la hoja y frotarla directamente sobre la quemadura.
Para su conservación se puede poner la hoja en la nevera y utilizarla como un gel frío, excelente para calmar las quemaduras. Aplicarlo como gel lo hará sentir bien, pero no le proporcionará todos los beneficios de la planta, por lo que recomendamos preferir siempre la primera opción de aplicación.
Antes de colocar el aloe de vera sobre su quemadura, haga la prueba de la alergia. Póngase un poco de el gel sobre la parte interna de su brazo y deje actuar al menos una hora. Si no existe ninguna reacción, puede aplicarlo en el resto del cuerpo.
Repita la aplicación cada 6 horas. Este remedio alivia quemaduras típicas de sol, para quemaduras más graves lo mejor es asistir al médico.